Desgastando Minutos
jueves, 17 de abril de 2008
Las lágrimas corroen mi piel como ácido, esparciéndose por todo mi cuerpo, desgarrando la carne. Envuelta en sangre, purifico mi dolor. Las heridas no cicatrizarán jamás, más esta pena, no me rozará nuevamente
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario